El autor ha sido condenado a un año por robar en una tienda y a otro por atentado a la autoridad.
Un hombre ha sido condenado a un año de prisión por robar en un comercio de la ciudad y a otro por atentar contra la autoridad. Cuando fue detenido y trasladado a la Comisaría de la Policía Local, intentó huir de allí y para ello agredió dando “una estocada” con un bolígrafo a uno de los agentes.
El juicio por estos hechos fue celebrado ayer en el Juzgado de lo Penal número 2 de Melilla, aunque los hechos tuviero lugar el 28 de agosto de 2012.
Robo en un comercio
Según explicó la titular del juzgado, en esa fecha el acusado entró en el Massimo Dutti de la Avenida Juan Carlos I y fue sorprendido por las encargadas cuando intentaba llevarse una prenda sin abonar su precio.
Las empleadas le recriminaron su actitud y le exigieron que pagase el coste del artículo. En ese momento, el acusado reaccionó “moviendo una mesa” y acorralando con ese mueble a las trabajadoras. Tras ello, huyó del local.
El inculpado se dirigió hacia el Parque Hernández, donde fue interceptado por dos agentes de la Policía Local que habían sido avisados por las trabajadoras del comercio atracado.
Empujón a un policía
El fugitivo trató de impedir su detención y para ello dio un empujón a uno de los agentes, que cayó al suelo ante el ímpetu del agresor.
El otro efectivo logró agarrar al acusado y, tras un duro forcejeo, consiguió reducirlo.
Una vez en la Comisaría de la Policía Local, el arrestado, muy nervioso, trató de escapar cuando estaba siendo sometido a un interrogatorio. Fue entonces cuando agarró un bolígrafo y agredió con ese objeto a otro agente. Sin embargo, tras esta nueva agresión, pudo ser reducido de nuevo.
En el juicio de ayer, el Ministerio Fiscal modificó su escrito de acusación inicial, en el que calificaba la conducta imputada al inculpado como un delito de hurto. Tras repasar el atestado policial, los hechos pasaron a ser calificados como sendos delitos de robo con violencia e intimidación y de atentado contra la autoridad.
El fiscal propuso al abogado de la defensa la posibilidad de aplicar a su cliente una pena menor si éste reconocía su responsabilidad en los hechos. Así, la acusación pública solicitó a la juez una pena de un año de prisión por el robo en la tienda y otra de la misma duración por las agresiones a los policías.
Indemnización a los agentes
El acusado admitió su responsabilidad en los hechos y aceptó la condena impuesta. Aparte de la pena de cárcel, deberá indemnizar con 210 euros a cada uno de los agentes a los que agredió.
Al no tener antecedentes penales, el condenado podrá librarse de ingresar en prisión, puesto que las leyes vigentes permiten este extremo siempre y cuando la sentencia de cárcel no sea superior a los dos años.
Sin embargo, si no abona la multa, no podrá eximirse del cumplimiento de la pena. Asimismo, si en el plazo de dos años volviera a delinquir, deberá ingresar en prisión y cumplir íntegra la pena.