El presidente de la AEF responde a las críticas de los dentistas tras el caso Vitaldent y dice que si hay un cambio de normativa, como pide el colectivo, debería aplicarse a todos los negocios sanitarios
El presidente de la Asociación Española de Franquiciadores (AEF), Xavier Vallhonrat, aseguró ayer a El Faro que las franquicias “no pueden ni deben” verse afectadas por la detención de la cúpula de Vitaldent ni por la investigación abierta ante un supuesto caso de fraude millonario a Hacienda y blanqueo de capitales. Explicó que la entidad que él representa estará junto a los franquiciados y los clientes de Vitaldent para que no se vean afectados y espera que puedan ser atendidos con normalidad.
–¿El arresto de directivos de Vitaldent a nivel nacional y la investigación abierta afectará de forma negativa a los clientes de la clínica de esta ‘marca’ que hay en la ciudad?
–Esperamos que no. Los portavoces de la Fiscalía y de la Policía Judicial han manifestado su voluntad de garantizar el trabajo de los franquiciados y por lo tanto, no debería pasar absolutamente nada. Por las noticias que tenemos, las clínicas han abierto en todas partes. Están trabajando sin impedimento. Si surge algún problema, sin duda, se resolverá. Al final esto es un tema que tiene que ver con un supuesto caso de blanqueo de dinero, que ya la justicia determinará si es así o no. Aunque es cierto que hay temor entre los miles de clientes que hay en todas partes, no creo que pase nada. Se atenderá a todo el mundo como hasta ahora.
–¿Cómo puede trabajar la clínica con materiales y productos de los que tenía un precio especial si a nivel nacional están afectados por esta investigación?
–Es un caso que habrá que ver. Los franquiciados estarán preocupados por esto, pero también están buscando una solución. En cualquier caso, nosotros estamos en contacto con diversas empresas que pueden ofrecerla en poco tiempo. De todas formas, si desde la entidad podemos intervenir para ayudar se hará con gusto porque lo que queremos es que la franquicia funcione y funcione bien. La meta es que la gente se sienta atendida y no se vea perjudicada porque ha habido un caso, grave, pero en donde no tiene que ver la gestión de las clínicas.
Sí es cierto que habrá suministros que pueden sufrir algunos problemas y que se irán solucionado, de la misma manera que ayer hubo dificultades de comunicación informática que ya están resueltas.
–Si alguna persona está inmersa en poner en marcha esta franquicia, ¿qué consejo le daría a este futuro emprendedor?
–Vitaldent es socio nuestro desde 1999 y durante todo este tiempo no recibimos ninguna queja de nadie. Pero también le diré que ayer mismo, a primera hora de la mañana, y teniendo en cuenta nuestros estatutos, tomamos la decisión de suspender la calidad de socio de Vitaldent y abrir un expediente para ver qué alegaciones tiene. Nosotros sólo tenemos noticias de prensa. Nada más. Por ello, nos gustaría que en un plazo de 15 días el socio nos aporte los datos que sean sobre este caso. El consejo en este momento es esperar y ver. Hay que resolver esta cuestión. Veremos cuando se esclarezca hasta dónde llega el caso. Por ahora es un momento para esperar y ver la solución que se da a Vitaldent en su conjunto. A partir de ahí, tomar una decisión. En caliente no se puede tomar ni la medida de entrar en la franquicia ni me marcharía corriendo. Ninguna de las dos.
–¿Teme que el proceso judicial abierto contra Vitaldent afecte de forma negativa a la ‘fama’ de la que viven las franquicias?
–Sólo conozco el caso de Vitaldent y otro de Funnydent, pero que no es una franquicia, sino una red de clínicas. En ambos casos, parece ser que el propietario hizo algo que no debía hacer. Lo que es evidente es que el concepto de negocio de Vitaldent ha funcionado hasta ahora perfectamente. Si es caro o barato, si se ha hecho mejor o peor, no lo sé. Pero sí tengo claro, porque lo he consultado con un odontólogo, que los tratamientos en Vitaldent se realizaban por profesionales de la odontología cumpliendo con todos los requisitos sanitarios. Nos encontramos con un supuesto caso de blanqueo de dinero en Vitaldent, pero también en otra cadena llamada Funnydent.
La conclusión a la que llego es que no tiene nada ver con el modelo de franquicia. En todos sitios hay gente mala, gente buena y gente regular. Por lo tanto, insisto no es un problema de las franquicias. El concepto de franquicia de Vitaldent, insisto, es válido y rentable para sus franquiciados. Otra cosa es lo que ha hecho el fundador con su dinero. De esta forma, este caso no puede ni debe afectar al sistema de franquicia.
–El Consejo General de Dentistas censuró ayer el modelo de franquicias dentales y exige un cambio en la normativa. La institución afirma que “se antepone el interés económico a la salud de los pacientes”. ¿Qué opinión les merece esta reclamación?
–Como franquicia este concepto está desarrollado correctamente. Otra cosa es que por precios, servicios o pagar a plazos Vitaldent tiene un éxito determinado y los dentistas tradicionales notan la competencia. ¿Qué hay que hacer con esto? Pues la frase ‘con la salud no se puede jugar’, como aseguran desde esta confederación, me valdría siempre y cuando no tuviéramos una serie de servicios sanitarios como negocios. Me refiero a las clínicas estéticas, de fertilidad o de otros servicios sanitarios que no son de atención primaria y que están enfocadas como empresas. Por lo tanto, si hay alguna regulación con la Odontología, creo que habría que ir más allá y ver también otras temáticas.
Xavier Vallhonrat: “Melilla es un mercado que a las franquicias les viene bien”
–¿Qué tal es el negocio de las franquicias en Melilla?
–Conozco personalmente el mercado de las franquicias en esta ciudad. Estuve en Melilla hace muchos años pues abrí una allí. Es un mercado interesante. Es un mercado que a la franquicia le viene bien. Tener un franquiciado en Melilla es una buena opción porque a la desventaja del desplazamiento, tiene la ventaja del emprendedor local que quiere poner el negocio en marcha. Entiendo que es un ámbito donde Melilla tiene muchas posibilidades. Me consta que las franquicias que están en la actualidad en la ciudad funcionan muy bien.
–¿Tiene buenos recuerdos de la ciudad?
–Aprovecho también para decirle que me llevé una magnífica sorpresa al comprobar que es una ciudad muy bonita. Se me ha quedado grabada con esos edificios modernistas y esas avenidas que recuerdo con bastante cariño.
–Por lo tanto, ¿Melilla es un buen lugar donde instalar una franquicia? ¿Quizás porque los impuestos son menos elevados que en otra región?
–También por eso. Pero, sobre todo, porque el funcionamiento de la franquicia tiene un punto clave: el franquiciado debe ser el adecuado para dicha empresa. Si se elige bien al franquiciado en Melilla, te evita tener que pensar en un local y en su búsqueda desde la península. Si hay un comerciante melillense es el que mejor conoce la zona y la ciudad, recomienda los sitios donde instalarse y conoce el entorno para explotar el negocio debidamente. Nosotros que vivimos en Barcelona y Madrid conocemos parte, pero es cierto que quien mejor sabe de los lugares son las personas que viven allí. El franquiciado melillense que responda al perfil es una buena opción para emprender en la ciudad.