Las ONGs que se personaron en el caso por los rechazos en frontera en la valla no ven bien que se entregue la Cruz al Mérito Militar al coronel, que estuvo imputado.
El pasado miércoles la Comandancia General de Melilla (Comgemel) entregó la Cruz al Mérito Militar con distintivo blanco al coronel jefe de la Guardia Civil en Melilla, Ambrosio Martín Villaseñor. Ante esta condecoración, las ONGs que se personaron como acusación particular en el caso de las ‘devoluciones en caliente’ de octubre de 2014 lamentan que una persona que estuvo imputada en esta causa por llevar a cabo una práctica considerada por ellos como “irregular” reciba esta distinción.
Pro Derechos de la Infancia (Prodein), la Coordinadora de Barrios, Andalucía Acoge y SOS Racismo, cuatro de las cinco organizaciones que se personaron, mostraron ayer a El Faro su desacuerdo con esta entrega y destacaron que, al tratarse de un asunto militar, deriva del propio Ministerio de Defensa la condecoración.
Acto “ilegal”
Una de las razones que esgrimen estas organizaciones para criticar la entrega de la medalla es que si el caso de las ‘devoluciones’, que tenía detrás una acusación de prevaricación hacia Villaseñor, fue sobreseída, fue porque no pudieran demostrarse los supuestos malos tratos a los inmigrantes, dado que no fueron localizados para declarar.
Además, Patricia Fernández, abogada de la Coordinadora de Barrios encargada de este caso, apunta que la propia Audiencia Provincial consideró “ilegal” esta práctica. “Parece que le están dando un premio por los servicios prestados”, argumenta esta letrada, que añade que esta condecoración “evidencia que el Gobierno sigue despreciando los derechos humanos”. “Es una patada más a los derechos fundamentales”, dijo.
Por otro lado, José Luis Rodríguez, abogado de Andalucía Acoge, apunta que antes de darle distinción alguna, se debería haber esperado a que “se resolviera disciplinariamente el caso”, dado que recalca que “el Tribunal dijo que no había prevaricación, pero que era ilegal”, por lo que espera que se sancione desde la Dirección General de la Guardia Civil.
En Estrasburgo
Por su parte, José Palazón recuerda el calado de este hecho, que se encuentra en el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo, donde se está estudiando la legalidad de lo acontecido. Hace también mención el activista melillense a las declaraciones de Nils Muiznieks, comisario de Derechos Humanos del Consejo de Europa, que puso en tela de juicio la legalidad de los rechazos.
“Me parece muy mal que una institución como la militar condecore al responsable de las ‘devoluciones’, una práctica que es ilegal. Las denuncias se pueden volver a abrir si aparecen los testigos”, aseguró Palazón, que matizó que “en ese momento”, los rechazos en frontera iban “contra la propia legislación española”.
Por otra parte, desde SOS Racismo aseguran que la entrega de la Cruz al Mérito Militar “refleja la nula voluntad por parte del Gobierno de investigar lo que ocurrió y sigue ocurriendo en la valla de Melilla”. Además, apuntan que el Ejecutivo no tiene pretensión de afrontar este hecho “con objetividad”. “Se ríen a la cara de las entidades que queremos aclarar lo que pasó”, sentencia.
En términos generales, por tanto, esta ONG dice que la condecoración a Villaseñor demuestra “cierto cinismo” por parte del Gobierno, y recuerdan que, tanto Estrasburgo como el comisario de Derechos Humanos siguen viendo atisbos de ilegalidad en la prática de las ‘devoluciones en caliente’ en la frontera de la ciudad.
La Dirección de la Benemérita debe actuar
Una de las ONGs de la acusación particular en el caso de las ‘devoluciones en caliente’ en la valla de Melilla en octubre de 2014, Andalucía Acoge, lo tiene claro: la Dirección General de la Guardia Civil debe actuar y, al menos, considerar si desde el Cuerpo hay que sancionar a Ambrosio Martín Villaseñor, coronel jefe, y a otros agentes.
Así lo aseguró ayer a El Faro José Luis Rodríguez, abogado de esta organización, que recuerda que esta asociación presentó un escrito citando el reglamento sancionador de la Benemérita y pidiendo “de conformidad” con esta normativa que se estudiara el expedientar a Villaseñor.
Rodríguez explica que hicieron esta solicitud el 28 de abril y posteriormente el 29 de julio. Cabe destacar que la desimputación del coronel jefe de la Guardia Civil en Melilla se conoció el 22 de abril.
Lo que este letrado cree es que, al considerar el juez ilegal la práctica, pero rechazar el delito de prevaricación por el que se le acusa, se debería estudiar sancionar a Villaseñor desde el propio Cuerpo.
Asimismo, el abogado de la ONG señala que aún no les han notificado nada, pese a haber hecho dos veces la petición. Además, dice que “es obligatorio por disposición adicional” poner en conocimiento de la Dirección General estas peticiones.
Un protocolo “recurrido” y que no era legal
Uno de los argumentos que da la Coordinadora de Barrios, una de las ONGs que se personaron en la acusación particular por el caso de las ‘devoluciones en caliente’ en la valla de Melilla en octubre de 2014, es que la orden de retornar a los migrantes a Marruecos se dio “amparándose en un protocolo recurrido” y con “evidencias de ilegalidad”.
Dadas estas circunstancias, esta organización critica que se dé “un premio” al coronel jefe de la Guardia Civil en Melilla, Ambrosio Martín Villaseñor, por considerarlo responsable de dar la orden.
Sobre la hipótesis de que no pudiera más que dar ese mandato a los efectivos, la abogada de la ONG, Patricia Fernández, apunta que se está hablando de “un coronel que tiene unas responsabilidades” y que podría haber respondido“ si entendiera que un mandato va es contrario a la legalidad.
Por lo tanto, no cree que se pueda excusar al responsable por este acto.