La Guardia Civil ha recuperado en Melilla un coche de lujo, valorado en 93.000 euros, que fue alquilado en París con la supuesta intención de pasarlo a Marruecos
, una táctica habitual por la cual el arrendatario presenta posteriormente una falsa denuncia de robo.
En una nota de prensa, la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla informó ayer de que los hechos ocurrieron el pasado 24 de diciembre, cuando se recibió una llamada telefónica procedente de una empresa de alquiler de vehículos de lujo ubicada en París (Francia).
La empresa quería pedir ayuda a la Guardia Civil porque tenía arrendado a un ciudadano maliense un vehículo de alta gama, un Maserati Ghibli, con unas especiales y restrictivas condiciones de contrato, pero sorprendentemente lo habían localizado en Melilla mediante la señal emitida por el sistema GPS del que dispone el coche.A Marruecos
Por ello, pedía a la Guardia Civil que localizara el vehículo ante el temor de que pudiese ser introducido en Marruecos, mientras un representante de la empresa se desplazaba con inmediatez a Melilla para presentar denuncia por el robo del vehículo.
El instituto armado inició las gestiones para tratar de localizar el turismo y después de varios días de “intensos y continuos servicios” para dar físicamente con él, la Guardia Civil lo localizó circulando por el centro de Melilla con dos personas en su interior, distintas al tomador del contrato de arrendamiento y sin la documentación que lo amparase.Detenido
La Guardia Civil procedió a la inmovilización del vehículo y traslado a la Comandancia para su aseguramiento, ya que sospecha que había sido trasladado a Melilla con el fin de introducirlo posteriormente en Marruecos cuando hubiesen ultimado las manipulaciones precisas y las condiciones lo permitiesen.
El conductor del vehículo ha sido detenido y puesto a disposición judicial como supuesto autor de un delito de robo de vehículo, tratándose de un ciudadano de nacionalidad marroquí, de 32 años de edad, al que le constan antecedentes por hechos de la misma naturaleza.
El coche recuperado es un Maserati Ghibli de color blanco valorado en un total de 93.000 euros. El método utilizado por los delincuentes es una táctica habitual para quien pretende obtener dinero mediante el robo de vehículos de alta gama.