Los populares estaban serios al ver la pérdida de escaños a nivel nacional, aunque satisfechos con el trabajo realizado aquí.
Fue una noche de nervios. Los simpatizantes y afiliados entraban y salían de la sede del Partido Popular. Un grupo de fieles se engancharon a la televisión y otro esperaba en el portal los escrutinios entre charlas. Los candidatos estaban en los despachos. Allí esperaban las noticias y las actualizaciones del recuento de los votos nacionales y locales. Los simpatizantes del PP se mostraban preocupados por esos primeros datos que no daban tan buenos resultados como querían para Mariano Rajoy. Con sus móviles actualizaban la página del Ministerio del Interior para ver cómo iban los datos de Melilla ya que en las televisiones no se hablaba de ello. Eran las 22:30 horas y aún no había noticias de los compañeros que estaban en las mesas electorales. La noche pasaba y las malas noticias nacionales minaban las sonrisas de los afiliados del PP. Todos tiraban de teléfono y los mensajes no paraban de sonar cuando la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaria, salía para decir que el PP ganaba las elecciones, pero perdían diputados, de 186 pasaban a 123 en el Congreso. Los datos de Melilla Unos minutos más tarde se oían los aplausos desde la sala de prensa. Los populares aplaudían los datos más avanzados de cómo quedaba el reparto de los dos puestos de senadores. No fue hasta las 23:35 horas cuando los miembros de las mesas electorales del PP comenzaron a llegar a la sede. Los recuentos en Melilla siempre van más lentos que en el resto de España. Los apoderados y los interventores entraban por la puerta a cuenta gotas. Mientras, otros voluntarios llamaban por teléfono a sus contactos en las mesas para conocer cómo iba el escrutinio. La candidata al Congreso, María del Carmen Dueñas, tenía su lugar asegurado en la Cámara Baja desde hacía una hora. Pero los datos del Senado no eran tan avanzados como para asegurar que el PP ganaba de nuevo. ¿Qué pasará con Acedo? El recuento de votos del Senado fue tan lento que el candidato a la Cámara Alta, Juan José Imbroda, dio la rueda de prensa con 16 mesas de las 78 sin cerrar. Imbroda había previsto hablar sobre las medianoche, pero lo retrasó para escuchar el discurso de Rajoy. De nuevo los aplausos hicieron acto de presencia tras las palabras del líder del PP. Ahora sólo queda conocer cuándo dejará Sofía Acedo, candidata al Senado por los populares, su puesto como consejera de Economía y Empleo. Imbroda aseveró que de eso se hablaría más adelante porque lo importante anoche era celebrar que el PP había ganado las elecciones. Las caras largas desaparecieron tras las palabras de Imbroda y comenzaron los aplausos. Luego llegaron los abrazos a la nueva diputada y senadora y al senador que repite en su cargo.