Aseguran que están sufriendo muchas pérdidas por una obra sobre la que no se les consultó.
Ante las pérdidas económicas que los comerciantes de las calles O’Donell y Justo Sánchez Miñano dicen estar sufriendo desde que comenzaran las obras de remodelación y reacondicionamiento, estos empresarios consideran que sería de recibo que la Administración llevase a cabo un plan de compensación por el cual se paliase parte de esta caída de las cifras, al menos para que los negocios puedan subsistir y pagar los alquileres y a los trabajadores. Se trata de una opinión más que extendida entre los comercios de la zona, puesto que aseguran que desde que se comenzase a acometer estos trabajos, sus números han bajado entre el 40% y el 60% con respecto a otros años. Así lo aseguró ayer a El Faro de Melilla la dueña de una tienda que, además, lamenta que no se avisara a las tiendas antes de emprender las obras, puesto que dice que hizo el pedido teniendo en cuenta las cifras de venta del año anterior y ahora no sabe qué hacer con tanta mercancía. “¿Me la pongo de moño?”, se pregunta esta comerciante, que asegura que no puede dar marcha atrás al material que ha solicitado para los próximos cinco meses y se ha encontrado con que las ventas han caído en su tienda cerca de un 40%. “Estoy poniendo dinero de mi bolsillo y no sé cómo pagar a las empleadas”, lamenta esta empresaria de la calle O’Donell. “Una subvención me parecería una muy buena idea para que aguantásemos, al menos, durante los meses que duren las obras”, apunta otra trabajadora de uno de los locales de la céntrica vía, que añade que no sabe cómo va a aguantar su negocio con las pérdidas que está teniendo actualmente.
“Ideal”, “genial”
“Sería ideal que nos dieran una ayuda para sufragar las pérdidas que estamos teniendo”, apunta también un comerciante de la zona. Del mismo modo, otra empresaria califica que sería “genial” una subvención, puesto que asegura que ha abierto su negocio recientemente y que sus números han bajado un 30%.
Campaña de Navidad, finalización o parón de las obras
Por otra parte, uno de los aspectos que los comerciantes de las calles O’Donell y Sánchez Miñano temen es que los trabajos influyan en su campaña de Navidad. Estos empresarios dudan de que las obras estén acabadas para el día 15 de diciembre, fecha en la que comienza la época de adquisición de regalos. Así pues, lamentan que si los trabajos no han terminado para entonces se paralicen durante un mes, haciendo que estos se perpetúen y que sigan sufriendo los malestares de las calles estrechas a causa de las vallas. Así lo aseguraron ayer a El Faro de Melilla varios comerciantes de esta zona, que temen ver reducidas sus ventas también en uno de los periodos más fructíferos del año para ellos. Asimismo, una empresaria de la zona argumenta que, dado que recientemente la Administración parece haber cambiado de idea en cuanto a la peatonalización de las calles, no se fía de que realmente las obras duren lo establecido. Además, teme que terminen afectando a la temporada de rebajas, otra de las más fuertes para estos empresarios. Por tanto, los comerciantes de esta zona miran con incertidumbre hacia la Navidad, temiendo que los trabajos de remodelación de la plaza y las calles no estén listos para estas fechas.