La asociación de vecinos aboga por que la supuesta penalización a la adjudicataria sirva para paliar el malestar de residentes y comerciantes.
La Asociación de Vecinos de El Real, que ha sido muy crítica durante el desarrollo de las obras en este barrio melillense, apuesta por que la posible sanción que pueda imponer la Administración a la empresa adjudicataria de las obras por el desarrollo de las mismas revierta en el propio barrio, en sus vecinos y comerciantes. Así lo aseguró ayer Jesús Motos, presidente de esta organización, en declaraciones a El Faro de Melilla. “Sería un buen gesto por parte de la Administración”, apuntó Motos, que añadió que están desarrollando un documento que pretenden presentar ante Fomento para formalizar esta petición. Hay que recordar que el primero en hablar de una penalización a la compañía que lleva a cabo los trabajos fue el ex consejero de Fomento, Miguel Marín, quién dijo que la empresa será sancionada por el retraso “injustificado” y apostilló que “el Gobierno no es responsable directo de la ejecución de una obra”. Así pues, ante estas declaraciones, la asociación de El Real considera que el hecho de que esta cantidad económica sirva para paliar las consecuencias que han ocasionado las obras sería una especie de solución a los problemas que han tenido, puesto que consideran que de no ser así, una penalización que no vaya a parar al barrio “no soluciona nada”. “Una vez terminadas las obras no nos ayuda que se le imponga una sanción a la empresa”, sentenció el presidente de la organización.
“Chapuza intolerable”
Por otra parte, el pasado viernes 14 de agosto, Marín también apuntó que la ejecución de los trabajos de remodelación del barrio están siendo “una chapuza intolerable” y se mostró “totalmente de acuerdo con los vecinos y comerciantes”. Ante estas declaraciones, Motos considera que la Administración “admite la realidad” y aseguró sentirse satisfecho de que se reconozca que sus quejas y reivindicaciones han sido legítimas. “Las declaraciones nos dicen que, evidentemente, han visto la realidad”, señaló el presidente de la asociación vecinal, que apuntó que es evidente que las críticas vertidas desde su organización, ya sea directamente o a través del grupo de Facebook, han llegado al Ejecutivo local.
Responsabilidad
Sobre las posibles responsabilidades acerca de lo que consideran una mala ejecución de las obras, la asociación considera que hay dos tipos de culpables. Por un lado, aceptan que la mayoría del peso de la situación lo tiene la empresa adjudicataria. Así pues, Motos señaló que “lo que más molestias ha creado, como los socavones, los maceteros o la reapertura de la calzada, son responsabilidad de la empresa”. Al respecto, el presidente de la asociación apuntó que hay vecinos que ya están trasladando protestas sobre posibles incidencias que puedan causar las futuras lluvias, aunque Motos afirma que “eso ya se verá”. Sin embargo, por otro lado, el dirigente de la organización sí que achaca cierta responsabilidad a la Consejería de Fomento, puesto que asegura que “está claro que tendría que haber habido un mayor seguimiento por parte de la Administración”. “No estamos hablando de responsables políticos, sino de que debería haber habido más técnicos de la Ciudad a pie de obra para controlar lo que la empresa estaba haciendo”. Por lo tanto, la conclusión que Motos saca de la situación es que la Administración, tras muchas quejas por parte de la asociación, ha admitido los errores que se han cometido en la zona, por lo que la organización alberga “esperanzas” de que a partir de ahora se preste más atención a las impresiones de los vecinos y que estas declaraciones sean un primer paso para mejorar la situación.
Mobiliario urbano diferente al del proyecto inicial
La Asociación de Vecinos de El Real está empezando a observar “diferencias entre el proyecto inicial y lo que se está haciendo” en cuanto al mobiliario urbano que se está colocando en algunas zonas del barrio que han sido objeto de las obras de remodelación. En concreto, lamentan que la disposición de algunos de estos elementos no sea la que estaba recogida en el proyecto de obras y que, además, se estén dando casos en los que los nuevos bancos y papeleras conviven con los antiguos. La asociación cree que se están colocando elementos “de manera aleatoria”.