La Cofradía del Nazareno realizó ayer su primera estación de penitencia de esta Semana Santa l El tiempo acompañó y los melillenses salieron a la calle a ver la procesión l Una saeta al inicio del itinerario logró despertar la admiración del público
Toros, seguida de la primera ‘levantá’ despertó los aplausos de los espectadores que mostraron así su admiración por el enorme esfuerzo de todos los costaleros que iban meciendo el trono para encaminarse hacia la carrera oficial. Por delante del trono nazarenos y mantillas acompañaban la talla del Cristo de La Sentencia que salió por primera vez a la calle en 1947 y desde hace doce años es la protagonista del Lunes Santo en nuestra ciudad. Los aplausos volvieron a resonar cuando, justo en el momento en el que el paso estaba frente a la puerta principal del coso taurino, una mujer se arrancó a cantarle una saeta a la imagen de Cristo ante Pilatos. Los costaleros cesaron su camino para escuchar atentos el canto y al finalizar la saeta las decenas de espectadores que había en las inmediaciones de la Mézquita del Toreo se fundieron en un emotivo aplauso.
Alrededor de las 21:45 horas llegó a la carrera oficial, después de parar unos minutos para que los costaleros descansaran y retomaran fuerzas. En la Avenida los melillenses también arroparon a los cofrades y a la imagen de Cristo frente a Pilatos, tal y como habían hecho en todo el recorrido. Unos minutos más tarde hizo su paso por la tribuna oficial, para comenzar pocos metros después el camino de vuelta a la Plaza de Toros, donde regresó poco antes de la medianoche.
La Sentencia descansa ya en el coso taurino hasta el próximo año, con la satisfacción entre los hermanos de haber podido cumplir con la tradición y haber recorrido las calles de la ciudad arropados por los melillenses.
Los cofrades del Nazareno se preparan ya para su siguiente estación de penitencia que saldrá a la calle el Miércoles Santo. En esa ocasión será el Cristo Nazareno y la Virgen de las Lágrimas los que saldrán de la Plaza de Toros para, si nada lo impide, encontrarse con los melillenses un año más. Dos días más, el Viernes Santo, uno de los días más grandes de la Semana Santa local, será el momento de ver procesionar el Santo Entierro, que como es tradicional irá acompañado por una comitiva del Gobierno local. Será la última procesión de la cofradía más antigua de nuestra ciudad.
El sábado, aún con el olor a incienso impregnado, los hermanos del Nazareno realizarán el traslado de sus titulares desde la Plaza de Toros hasta la iglesia de La Purísima, donde aguardarán hasta el 2016 para volver a ser los protagonistas de la Semana Santa. Hasta que llegue ese momento, los melillenses y los cofrades aún tienen por delante días para disfrutar el recogimiento, la Pasión y el fervor que despierta cada año la Semana Santa en nuestra ciudad. El Lunes Santo cumplió, igual que el Domingo de Ramos, y los hermanos de las cinco cofradías melillenses rezan ahora para que el resto de la semana siga luciendo igual y los melillenses continúen respondiendo dando su calor a los cofrades en la calle.