El arrestado se percató de la presencia policial en la Estación Marítima cuando desembarcaba del barco procedente de Málaga. Su actitud esquiva y nerviosa levantó las sospechas de los agentes.
La Policía Nacional informó ayer de la detención el pasado miércoles de un joven de 22 años como presunto autor de un delito contra la salud pública tras ser sorprendido en el puerto de Melilla con 276 pastillas de droga escondidas en el interior de un aparato descodificador de Televisión Digital Terrestre (TDT). Los hechos sucedieron a las 20:30 horas, durante el desembarco del buque procedente de Málaga.
Dos policías del Grupo de Atención al Ciudadano (GAC), que estaban libres de servicio paseando por la Estación Marítima, observaron entre el pasaje que desembarcaba a un individuo al que conocían por su relación con el menudeo de droga.
Al reconocer a los agentes, el joven comenzó a mostrarse nervioso, cambió el sentido de su marcha y aceleró el paso, actitud que despertó las sospechas de los agentes, que iniciaron un breve seguimiento de este individuo. Finalmente, consiguieron interceptarlo justo antes de que pudiera acceder a los aseos de la terminal de pasajeros. Cuando preguntaron al joven por su actitud, éste contestó de forma nerviosa e incoherente, proporcionando respuestas contradictorias.
Ante la sospecha de que pudiera llevar ocultas sustancias estupefacientes, los agentes le invitaron a que les acompañase a las dependencias policiales del puerto, donde registraron su maleta, en cuyo interior encontraron envuelto en prendas de vestir un aparato TDT.
Al agitarlo, escucharon un ruido extraño y observaron que a través de unos espacios abiertos de este dispositivo se veía lo que parecían envoltorios de plástico.
Los agentes procedieron a abrir el aparato, encontrando en su interior 190 pastillas de trankimazin distribuidas en cinco botes de cristal y 86 pastillas de tranxilium en envoltorios de plástico, por lo que procedieron a la detención del joven como presunto autor de un delito contra la salud pública.