El técnico del conjunto melillense reconoce que la plantilla está enrabietada por las críticas recibidas y con ganas de que llegue el partido para cambiar reconducir toda la situación liguera
La UD Melilla recibe el domingo al mejor equipo del Grupo IV en el último mes. Al menos eso indican los resultados cosechados por el CP Cacereño, cuya reacción se ha visto premiada con el abandono de la última plaza de la clasificación hasta alcanzar el puesto de promoción de permanencia dejando hasta cuatro equipos por detrás, entre ellos al conjunto azulino.
Currás y sus jugadores son conscientes de la importancia del partido del domingo frente a un equipo al que pueden superar en la clasificación si se le gana, y en ello están centrados. En afrontar el duelo como si de una final se tratara.
Final anticipada
“Ese es el término que solemos utilizar últimamente, ya que estamos afrontando los partidos con la necesidad imperiosa de ganar los tres puntos. Se nota que el equipo lo que necesita es ganar, es lo que queremos todos. Estamos peleando por ello, unas veces con más acierto y otras con menos, como nos ocurrió en el partido más reciente, que nos dejó con esa sensación de haber cortado un poco la progresión que llevábamos”, manifestó el entrenador unionista.
“Va pasando la semana y te das cuenta de que sin estar bien, tuvimos ocasiones e incluso fallamos un penalti. A veces tengo la sensación de que nos gusta la destrucción. La situación es la que es. Estamos en puestos de descenso y tenemos que ganar, por que si no cada vez la cosa se complica más y es más difícil jugar. Desde que acabó el partido del domingo ante el Arroyo, la gente quería jugar ya. Eso tenemos que demostrarlo el domingo y ya está. Tenemos que mantener lo bueno que tenemos ahora mismo, que es esa solidaridad y esa solidez defensiva, y lo que está claro es que en el aspecto ofensivo tenemos que proponer mucho más que lo que propusimos el último día. En eso estamos. Trabajando para ganar los tres puntos que nos mantengan en la pelea. No es una final por que si ganas no vas a salir de ahí, pero si pierdes todo se magnifica mucho más. Creo que hay que desdramatizar un poco y demostrar el domingo que tenemos equipo para salir de ahí”, apuntó Fernando Currás.
El técnico azulino apuntó que esta temporada se está juntando una adversidad con otra, sin dar respiro al equipo. “Parece que todo nos va en contra. Es una prueba continua de superar adversidades. Ayer acabé la sesión de entrenamiento con cara de optimismo porque les he visto que quieren dar la vuelta a la situación, empezando por los resultados para dar la vuelta a las críticas y para que el tema económico se solucione de una vez por todas, entre otras cosas. El equipo está con ganas de contestar, y la mejor manera de hacerlo es en el campo y yo estoy a muerte con ellos. No me gustan las escusas. Me guardo lo que pienso. Yo no puedo jugar, pero los que pueden hacerlo quieren demostrar en el terreno de juego lo cabreado que estamos y en este caso tengo plena confianza en que las cosas van a salir bien”, expresó.
En cuanto a si el Cacereño es el rival idóneo para medirse en un momento en el que se encuentra en una dinámica positiva y que de no ganar dejaría muy tocado al equipo azulino, el preparador gallego valoró que “Sí. Cualquier rival que viniese iba a ser el momento idóneo. Tenemos muchísimas ganas de cambiar esta situación, y sabemos que solo se cambia ganando partidos. Lo realmente importante es cómo afrontemos el partido y como lo desarrollemos. En eso tenemos puestas todas nuestras fuerzas. El Cacereño es un rival que ahora llega con otros ánimos al conseguir esas victorias que necesitaba”.
CP Cacereño
Ellos también lo han pasado mal y eso es lo que estamos persiguiendo nosotros: encontrar esa gasolina, ese aire fresco que te dar el ganar. El estado de ánimo con el que viene el Cacereño aumenta aún más la dificultad, pero hemos afrontados partidos contra rivales superiores y de mayor entidad y el equipo ha dado la cara más allá de los puntos. El Cacereño va a ser un rival complicadísimo. Tienes buenos jugadores y el estado de ánimo que tiene ahora mismo es un factor a su favor. Estamos más mentalizados que nunca para conseguir los tres puntos. Sabemos que no es fácil, que ahora hay cosas más fáciles que apoyar, pero eso forma también parte de esta profesión. No pretendemos que la gente nos dé palmaditas en las espalda estando los últimos, aunque es verdad que a los futbolistas les gustaría tener un poco más de cariño”, manifestó.