El empresario melillense, arrestado por la Guardia Civil en el caso ‘Sacaleta–Bracos’, ya está en libertad. Le acusan de encargarse de la logística y envío de hachís en lanchas a la península.
El único melillense detenido en el marco de la operación ‘Sacaleta–Bracos’ realizada por la Guardia Civil, supuesto líder de la red de narcotráfico más activa en España, es Mohamed Halifa. Quedó en libertad horas después de ser detenido y puesto a disposición judicial en el Juzgado de Guardia de Melilla, según afirmaron fuentes judiciales a El Faro. La investigación apunta a que el empresario melillense, conocido años atrás por el llamado ‘caso Novolujo’ que investigaba delitos de blanqueo de capitales y que fue posteriormente archivado por el juzgado, era el encargado de la logística y organización de los envíos de droga en lancha desde Marruecos a la península.
De los siete detenidos en la operación de la Benemérita, dirigida por el Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional, Halifa es el único que está en libertad. El resto está en prisión. Todos acusados de un delito de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal.
Es el caso de los dos ciudadanos de nacionalidad española que pilotaban la lancha interceptada el pasado 11 de junio por el buque ‘Río Miño’ de la Guardia Civil en el mar de Alborán con dos toneladas de hachís. Hasta el momento, esta incautación es el único envío que los investigadores han abortado durante los 10 meses de investigación.
Contactos en la península
Además de estas tres detenciones, la Guardia Civil realizó cuatro arrestos más entre ellos dos agentes de la Benemérita con los que, según la investigación, Mohamed Halifa se coordinaba para asegurar los envíos de droga desde costas marroquíes a diferentes puntos de la península. Por ejemplo, las costas de Alicante donde estaban destinados los dos guardias civiles encartados.
La orden de detención de Mohamed Halifa venía de la Audiencia Nacional acompañada de una orden de entrada y registro en su vivienda. Sin embargo, no ha trascendido qué tipo de evidencias recabó la Guardia Civil en el domicilio del empresario melillense, pues la investigación del Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional continúa bajo secreto de sumario. Por tanto, no se descarta que se produzcan más detenciones de personas que pudieran estar implicadas o relacionadas con la red de narcotráfico desarticulada por la Guardia Civil en la operación ‘Sacaleta–Bracos’.
El papel del cabecilla de la red
Las pesquisas policiales afirman que Mohamed Halifa se encargaba de organizar toda la logística para llevar a efecto los envíos de droga a la península. Adquiría embarcaciones con motores de alta potencia y daba las órdenes para realizar las modificaciones necesarias para esconder la droga.
Además, buscaba y contrataba a pilotos muy cualificados en navegación, concretamente personas procedentes de Galicia y experimentados en navegar en condiciones de “mala mar y adversas” para cruzar el mar de Alborán.
Los orígenes de la investigación, que comenzó en septiembre del año pasado, aún están bajo secreto de sumario. Sin embargo, fuentes cercanas a las pesquisas policiales explicaron que se llegó a la identificación de Mohamed Halifa como supuesto cabecilla de la red de narcotráfico asentada en Melilla a medida que se iba desarrollando la investigación.
Las pesquisas se llevaron a cabo entre la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla y Tarragona y las detenciones se realizaron, además de en Melilla y Alicante, en Madrid y Valencia.