Es la primera vez en este acto religioso que el imán hace su discurso a los fieles en español. Abdelaziz Hammaoui animó a los musulmanes a ir a las mezquitas tras el Ramadán.
Más de 5.000 personas asistieron ayer el rezo colectivo que todos los años se organiza en la explanada cercana al Tercio de la Legión. El Aid El Fitr es un día de fiesta con el que se pone fin a un mes de sacrificio y de ayuno. Por eso, niños, mujeres y hombres de todas las edades asistieron a esta oración en la que el conflicto entre Israel y Palestina estuvo muy presente. El encargado de dirigir el rezo fue el imán y presidente del Centro Cultural Islámico de Valencia, Abdelaziz Hammaoui, y por primera vez en la historia de este encuentro religioso el discurso tras la oración se hizo en castellano. Hammaoui resaltó que es un paso más para que las palabras del imán lleguen a todo el mundo y valoró que la Comisión Islámica llevara a cabo esta iniciativa.
Los melillenses musulmanes comenzaron a llegar al rezo a las 9:00 horas aunque la oración no comenzó hasta media hora más tarde. Los atascos de vehículos que subían en dirección a Rostrogordo por el Tiro Nacional y Cabrerizas se hacían más grandes debido a la afluencia de fieles a este rezo, aunque entre la Policía Nacional y la Local organizaron los coches para distribuirlos entre los diferentes descampados para que aparcaran y también para controlar que los peatones no sufrieran ningún percance.
Mientras que los hombres se colocaban en la explanada más amplia en la que se habilitaron numerosas esterillas para facilitar el rezo, la mujeres se dirigieron al campo de fútbol donde tendían sus alfombras para estar listas para la oración conjunta.
No hay edad a la hora de dar las gracias a Dios por permitirles vivir un Ramadán más. Por ello fueron muchos los ancianos y personas mayores que no desistieron en su empeño de participar en este rezo a pesar de no tener un buen estado de salud. Con muletas, bastones y dolores de huesos se sentaron en el suelo o en una silla que un familiar les facilitaba para que no estuvieron incómodos. También a esta cita con la religión musulmana asistieron muchos niños, algunos se quedaron con los padres y otros en cambio, preferían estar con las mujeres jugando con otros pequeños de su edad.
El rezo colectivo no sólo sirvió ayer a los musulmanes para agradecerle a Dios la fuerza que han recibido estos días para superar horas sin tomar agua ni alimentos, también les permitió saludar a muchos vecinos y conocidos. La explanada se llenó en menos de media hora y no cabía ni un alfiler y claro, al acabar el rezo, muchos fieles se encontraban con los vecinos de la calle en la que vivieron de niños o con familiares a los que iban a visitar más tarde a sus casas. Fue un día de oración y reencuentros. Por eso, mirara donde se mirara los abrazos, los besos y los buenos deseos eran la imagen más repetida.
El discurso en castellano
Hammaoui explicó a los fieles que el Aid El Fitr es una de las celebraciones más importantes para los musulmanes, junto con la fiesta del Sacrificio, que se conmemora dentro de dos meses y diez días. Aseguró que el fin de Ramadán es para celebrarlo con alegría porque gracias a la fuerza que Dios les ha dado a los fieles en estos días se ha podido superar un mes de ayuno y de abstinencia. El imán aseveró que esta fiesta hay que vivirla en hermandad, con amor y perdón, por ello animó a los fieles a reconciliarse con las personas con las que hayan tenido un enfrentamiento o discusión.
El presidente del Centro Cultural Islámico de Valencia señaló además que a los musulmanes les queda el paso más importante, tras acumular en sus corazones la espiritualidad de estos días toca transformarla en buenas acciones. Aseguró que ésta es la parte más difícil, pero que el Corán y el Profeta dan muchos consejos a los fieles de cómo poner en práctica todo lo aprendido en el Ramadán. Aseveró que una sonrisa es una buena acción, así como dar de comer a un animal o quitar un obstáculo que hay en un camino. Por otro lado previno a los musulmanes de aquéllos que sólo hacen Ramadán y luego olvidan sus valores y no acuden nunca más a la mezquita. Aseveró que ellos sólo cosechan hambre y sed y en cambio, el creyente que se aplica en dar vida a los valores del Islam sí recoge amor y hermandad.
Relación de hermandad
Hammaoui insistió en que debe haber una buena relación entre los musulmanes. Comparó a los creyentes con las partes del cuerpo. Explicó cómo si un miembro cae enfermo, todo el cuerpo acaba teniendo fiebre. Por ello, el imán animó a los fieles a reconciliarse con sus hermanos y a predicar el perdón.
El presidente del Centro Cultural Islámico de Valencia resaltó que los ritos religiosos son herramientas educativas que ayudan al creyente a ser mejor persona y por lo tanto les hace más sensibles. Aseveró que la espiritualidad que se consigue en este mes de Ramadán y siguiendo las indicaciones del Profeta hacen libre al hombre.
Asimismo, animó a los fieles a no callarse ante las injusticias y no sólo en referencia al conflicto que hay entre palestinos e israelíes, sino ante un desahucio o una dictadura porque no tiene sentido dedicarse a la espiritualidad si no se hacen críticas de estas situaciones negativas para la sociedad.
Por último, Hammaoui aseveró que el Corán dice que no es creyente quien duerme con la barriga llena mientras su vecino pasa hambre y añadió que el Profeta no habla de una religión ni de una cultura en concreto, sino de ayudar a la persona que sufre en general.