Un ciudadano de nacionalidad marroquí y de iniciales A.A. fue sorprendido por un Policía Nacional mientras trataba de forzar la puerta de dos tiendas en el Tesorillo.
El agente, que estaba fuera de servicio, reconoció al acusado por ser un delincuente habitual. Llamó a sus compañeros, que detuvieron al caco mientras trataba de entrar en una tienda de comestibles en el Tesorillo. El procesado no se presentó al juicio, pero éste se celebró en el Juzgado de lo Penal 1 en su ausencia.
El agente de la Policía Nacional que le reconoció el 24 de febrero de 2012, observó cómo el acusado trataba de forzar la cerradura de una tienda de fotografía. El policía aseguró que vio cómo A.A. cometía su fechoría porque se escondió entre dos vehículos. El ladrón desistió de continuar con su fechoría porque había gente en la vía pública que le podían delatar, por lo que se fue a una calle más solitaria e intentó forzar la puerta de una tienda de comestibles. Para entonces ya iba de camino una patrulla policial, avisada por el agente de paisano. El ladrón al percatarse de la presencia policial intentó huir, pero fue alcanzado por los agentes.