Categorías: Tribunales y Justicia

3.000€ de multa por chocar contra dos coches aparcados y simular que le habían robado

Otro melillense se enfrenta a 6 meses de prisión por llevar dos paquetes de droga bajo el pantalón. Dos jóvenes aseguraron en la Jefatura Superior de Policía que les habían robado el coche en las inmediaciones de la plaza de las Culturas, al no encontrarlo donde lo habían aparcado. Poco después otros agentes llegaron a la Comisaría para denunciar el choque de ese mismo vehículo contra otros dos aparcados en la Plaza de España.
Las pesquisas llevaron a los policías a concluir que estos dos jóvenes habían abandonado su turismo en la Plaza tras la colisión, por lo que fueron acusados de simular un delito. Ahora, uno de ellos F.M.H.N., tendrá que pagar 2.920 euros de multa en total, no solamente por simular un delito sino también por los daños causados a los dos coches que estaban bien aparcados en la noche del 23 de diciembre de 2010.
Su abogado defensor llegó a un acuerdo con la Fiscalía esta semana en el juicio celebrado en la sala de vistas del Juzgado de lo Penal número 2 en el que se conformó con la pena mínima por una falta en la simulación de un delito, con seis meses de multa a razón de ocho euros diarios, y otra multa por daños de igual duración y cuantía.
Su compañero aquella noche A.H.F. fue absuelto de un delito de daños, pero no de una falta por la simulación de un delito, por lo que también aceptó pagar una multa de 1.460 euros, ocho euros diarios durante seis meses, la pena mínima acordada con el Ministerio Fiscal para este tipo de delitos.

Droga en el cinturón
Por otra parte, en la sala de vistas del Juzgado de lo Penal número 1 esta semana el fiscal pidió por A.Y. una pena seis meses de prisión al ser sorprendido ‘in fraganti’ con dos paquetes de droga que ocultaba bajo el pantalón. El acusado no compareció en la sala, pero el juicio se llevó a cabo en presencia de su abogado defensor.
Los dos agentes del Cuerpo Nacional de Policía que intervinieron la droga y detuvieron a A.Y. aseguraron ante el juez que vieron al acusado en la calle General Polavieja que al percatarse de la presencia policial se tocaba mucho el cinturón. Las sospechas inciales se tornaron en certeza cuando al ser cacheado descubrieron que bajo el pantalón llevaba dos paquetes de droga.
El caso quedó visto para sentencia y ahora será la juez del Penal número 1 la que decidirá si aplica la pena mínima para los delitos contra la salud pública, recogidos en el artículo 359 y siguientes del Código Penal.

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