El secretario general de UGT Melilla, Paco Díaz, subrayó a El Faro que han recibido un gran número de quejas de trabajadores que han vuelto a sus puestos de trabajo estando dados de alta en un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE). En este sentido, aseveró que son muchos los negocios abiertos en la ciudad en comparación a los que han solicitado volver a la productividad, que rondan los 250, según datos de la semana pasada, siendo estos últimos empresas que han pedido reabrir, pero a menos capacidad de lo habitual.
Díaz aseguró que han recibido muchas quejas de empleados que han tenido que regresar a su puesto de trabajo aún estando bajo un ERTE y que eso ha motivado que hayan trasladado esta situación para Delegación del Gobierno. Son un número de quejas suficientes como para que te haya demandado desde este sindicato la intervención de la Inspección de Trabajo de la ciudad.
El secretario general de UGT de Melilla indicó que son casos de empleados que estaban en una situación de un expediente de regulación de empleo y que les han llamado para trabajar, pero sin quitarles de expediente por lo que mostraron su descontento porque sabían que es una situación ilegal.
Remarcó que muchos de estos trabajadores estaban asustados por si venía una inspección porque les puede caer una multa elevada al trabajar en estas condiciones. El sector de la hostelería, el comercio y la construcción son los que han manifestado sus quejas al verse en esta situación y, por eso, UGT se ha dirigido a la Delegación del Gobierno para que tomará cartas en el asunto.
De hecho, el sindicalista celebra que la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, indicara la semana pasada que la Inspección de Trabajo tiene un plan especial para controlar este tipo de situaciones a nivel nacional y que también se va a ejecutar en Melilla.
“Además de las denuncias que hemos podido recibir, solo hay que darse una vuelta por la ciudad para ver que los datos de empresas que han pedido volver a la productividad y a trabajar, aunque no sea 100%, y ves la realidad, los números no cuadran. Hay muchísimos más negocios abiertos de lo que realmente están solicitando esta vuelta a la normalidad”, aseguró. No obstante, UGT reconoció que fuera de los datos que ellos registran estarían los autónomos que puedan haber vuelto a abrir sus negocios, pero aún así, no creen que las cifras de empresas que han solicitado volver a la actividad coincidan con la realidad.
Díaz destacó que empresa y trabajadores van a necesitar muchos recursos durante mucho tiempo y que esas ayudas del Estado deben llegar a todas las personas necesitadas, por lo que aseveró que hay que acabar con estas situaciones de ilegalidad. Remarcó que no puede haber empresas abiertas y ofreciendo servicios con sus trabajadores en un ERTE, cuando habrá otras que necesitan de estos recursos públicos para sobrevivir.
“España va a necesitar cada céntimo. Si una empresa abre dos o tres días y ve que le va bien, que ya se está consumiendo en su establecimiento, debe de dejar esa situación de regulación de empleo”, afirmó insistiendo en que es necesario aprovechar bien cada recurso porque son muchos los negocios necesitados aportaciones estatales para salir adelante.
El secretario general en Melilla de UGT reconoció que hay muchos trabajadores en una ciudad sin cobrar aún la indemnización por el expediente de regulación temporal de empleo. Pero también matizo que los trabajadores del Servicio Público de Empleo no parado ni un solo día y han realizado su labor durante horas sabiendo la importancia de este dinero para muchas familias.
“Están trabajando 12 y 14 horas diarias. Pero es que hay un problema con el programa informático que se utiliza para el pago de las indemnizaciones. Si hay un número de teléfono que no esté correcto de un trabajador o de una empresa o cualquier pequeño dato que esté mal, como por ejemplo, el número de la casa de la dirección de ese empleado, no pueden meter los datos dentro de ese programa. Es un problema serio el que hay en este sentido”, remarcó.
Díaz explicó que han tenido que resolver, por ejemplo, un problema que había con 14 trabajadores de una empresa de Sevilla. Le había concedido el expediente de regulación temporal de empleo por silencio administrativo en Sevilla, pero la empresa no mandó aquí a Melilla la resolución que se le había dado y los trabajadores estaban sin conocer su situación y sin cobrar esa indemnización. “Si la empresa no mandaba esa resolución era inviable qué se pudiera pagar ese dinero a los trabajadores aquí en Melilla” y, por lo tanto, el sindicato tuvo que intervenir para enviar todas esas documentación y ahora ya han entrado en el proceso para poder cobrar.
Para el máximo dirigente de UGT en Melilla, no es que los retrasos en los pagos de estas ayudas sean culpa de los malos procesos de las empresas o del Servicio Público de Empleo, sino que es del proceso administrativo, que es complejo. Aseveró que tampoco se puede pagar sin más una indemnización a un trabajador sin ver la mínima documentación y que a todo esto, hay que sumar que se ha desbordado el servicio con la presentación de centenares de expedientes. Indicó que ha sido una avalancha la llegada de estás solicitudes no solo en Melilla, sino a nivel nacional.
De hecho, el sindicalista argumentó que en Melilla se han contratado a seis personas más para poder acelerar todos estos trámites en el Servicio Público de Empleo, pero el programa también tiene una capacidad limitada y en más de una ocasión se les ha colapsado y les ha tocado esperar horas hasta su reinicio. Este programa es central para toda España y los servidores se han visto colapsados en muchas ocasiones paralizando la labor de estas personas en la introducción de los datos.
A finales de la semana pasada el número total de ERTE era de 923, de los que se han aprobado 612 por el estudio de los mismos, y 55 rechazados, siendo el resto aprobados por silencio administrativo. Díaz explicó que la petición de estos expedientes se ha centrado en un mes, en el periodo de los últimos 15 días de marzo y los primeros 15 días de abril ,aunque reconoce que a lo largo de ese último mes se presentaron más solicitudes de este tipo.
Por otro lado, comentó qué son un total de 244 las empresas que han solicitado volver a la producción (datos de la semana pasada), aunque no todas al 100%, sino que algunas solo con algunos trabajadores y otros con un porcentaje determinado. “Ya se va entrando en una dinámica de recuperación de sistema productivo”, destacó Díaz. En este sentido, recordó que en Melilla viven 85.000 personas que no están saliendo ni a la península ni a Marruecos, por lo que ahora las empresas locales pueden ofrece todos sus servicios y aprovechar esta situación para consolidar sus clientes.
El dirigente de UGT cree que los negocios podrán “recuperar parte de lo que han perdido” en este cierre de más de dos meses para muchas de ellas.
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